¿Revisando perspectivas?
Johanna Prieto – Finanzas Corporativas
Varias son las reflexiones tras la primera rueda de prensa de la nueva Ministra de Industria, Comercio y Turismo con el fin de presentar las previsiones de turismo para este año. Reyes Maroto (o simplemente Reyes como la hemos llamado siempre sus compañeros, entre los cuales me encuentro en una de nuestras etapas anteriores) ha anunciado que aunque el ritmo de crecimiento se ha ralentizado, este verano se alcanzará un nuevo récord, superando por primera vez los 30 millones de turistas extranjeros. En su comparecencia menciona que aunque la recuperación de los destinos mediterráneos se está notando, prevé que la inercia se mantenga aún al menos un año más, poniendo el foco de su estrategia en este periodo en la consolidación del aumento del gasto por turista, definiendo para ello una estrategia de política turística sostenible triple. A grandes rasgos, las actuaciones perseguirán un turismo de calidad que deje más ingresos (sostenibilidad económica), la sostenibilidad medioambiental y la correcta distribución de la riqueza del sector entre los territorios y los agentes. Para ello, ha anunciado una serie de actuaciones específicas como son recuperar la Conferencia Sectorial de Turismo donde se abordarán con las Comunidades Autónomas la regulación de las viviendas de alquiler turístico y la mejora del empleo en el sector.
Sin entrar a cuestionar la efectividad y resultados en el corto/medio de la política a desarrollar por el nuevo Gobierno, valorando eso sí la estrategia de considerar al sector como esencial en el modelo de crecimiento del país, nos resulta obligado poner el foco en el escenario económico mundial para atisbar el comportamiento del sector en el medio plazo. Hasta hace unos meses, las perspectivas de crecimiento de la economía mundial de la totalidad de los agentes eran claramente positivas, sin embargo, en las últimas semanas el panorama, cuanto menos, se ha oscurecido. Si bien hablar de recesión global puede resultar excesivo, es evidente que con los actuales frentes abiertos, el ritmo anual del crecimiento mundial ha llegado a su máximo, iniciándose una fase de ralentización. La política de aranceles anunciada por Trump, la posible respuesta de los países a la misma, la incertidumbre del actual marco político europeo, la inestabilidad política en determinados países, y las primeras señales de sobrecalentamiento de algunas economías así lo evidencian.
En este escenario, consideramos más relevante si cabe analizar en profundidad las estrategias de inversión y/o de negocios en el sector, con el objetivo, no de descartar las mismas, sino de evaluar correctamente el riesgo y rentabilidad asociados. Creemos que el sector tiene aún mucho valor, existiendo muchas oportunidades de crecimiento y de inversión, y que la clave está en la adecuada evaluación del binomio rentabilidad/riesgos de las mismas, y, en su caso, la correcta definición y estructuración de las fuentes y condiciones de financiación.