Inversión made in Taiwan
MUNESH MELWANI, SOCIO-DIRECTOR GENERAL DE CROSS CAPITAL
27/08/2023
A muchos les resultará familiar esta etiqueta de “Made in Taiwán”, cuando la mayor parte de los productos, principalmente textiles y electrónicos que se fabricaban, venían de aquellos lares. Ha llovido mucho desde entonces y el país también ha ido evolucionando en las últimas décadas.
El desafío global del envejecimiento poblacional se está desarrollando a diferentes ritmos en todo el mundo. En Taiwán, este fenómeno está ocurriendo a una velocidad excepcional, de forma que el país recibió el calificativo de “sociedad envejecida” en 2018, proceso que se ha producido en tan solo 25 años y de hecho, está previsto que alcance el estado de “súper envejecimiento” para 2025, con más del 20% de su población superando los 65 años. Se espera que esta tasa aumente al 30% para 2039 y al 44% para 2070, superando incluso a Japón, la población más anciana del mundo. Las fuerzas impulsoras detrás de este cambio demográfico residen en la urbanización, las presiones de los distintos ciclos económicos y las cambiantes dinámicas familiares.
El fenómeno migratorio del campo a la ciudad ha hecho mella de forma muy notable en Taiwán. El pensamiento de asegurar el bienestar para la jubilación ha llevado a una menor dependencia de las generaciones futuras y a ahorrar para dicha finalidad, contribuyendo a una menor tasa de natalidad. La tasa de fertilidad en Taiwán ha disminuido drásticamente de siete nacimientos vivos por mujer en 1951 a 0.98 en 2021, una tendencia que se refleja asimismo en Corea del Sur (0.88) y Hong Kong (0.78). Esta disminución en los nacimientos ha elevado la proporción de dependencia de Taiwán, afectando tanto a la fuerza laboral como en la forma de vida de los grupos de edad dependientes.
En respuesta a esta tendencia al envejecimiento, el sector de la salud toma un creciente protagonismo, dado que la población envejecida es tendente a generar mayores costes sanitarios. Este fenómeno se ejemplifica por la generación de baby boomers, que ahora se acercan a la edad de jubilación. Las proyecciones del mercado mundial de cuidado de ancianos indican una robusta Tasa de Crecimiento Anual Compuesta (CAGR) del 7.0% entre 2022 y 2029, con un importe estimado de gasto de 2.36 billones de dólares para 2029.
Además, la “economía plateada” de consumidores (más de 50 años), con menos cargas económicas, pues ya han criado niños, pagado hipotecas y acumulan un patrimonio, lógicamente tienen un poder financiero y capacidad adquisitiva mayores que los más jóvenes. Esta dinámica se explica por el cambio en los tamaños de mercado entre la población anciana y el mercado juvenil. En 2010, este segmento poblacional superaba al joven en 23 países y en 2040 se espera que esta situación se de en 100, remodelando por tanto los mercados de consumo a escala global.
Japón, con casi un cuarto de su población con más de 65 años, ofrece valiosas lecciones sobre el envejecimiento saludable. Factores como una dieta nutritiva, ejercicio regular, años de trabajo prolongados y distintas iniciativas gubernamentales, han contribuido al estatus de Japón como ejemplo global a seguir. Este fenómeno se toma como referencia para la trayectoria prevista en Taiwán.
La población envejecida de Japón también revela un aspecto menos conocido: el próspero mercado de alimentos saludables y suplementos. Taiwán refleja esta tendencia a medida que la población envejece y busca mantener la salud y prevenir enfermedades crónicas. Esto ha llevado a un aumento del gasto en productos y servicios relacionados con la atención médica, impulsando un crecimiento significativo en el mercado interno de alimentos y suplementos, con un 8% interanual en el período 2010-22. El COVID-19 resaltó aún más la importancia de la atención médica preventiva, impulsando un consumo aún más sustancial de productos suplementarios.
En resumen, la población en rápido envejecimiento de Taiwán ha creado un escenario propicio para oportunidades de inversión. La creciente demanda de productos y servicios relacionados con la atención médica está remodelando los mercados e impulsando el crecimiento en diversos sectores. Esta evolución de Taiwán debería servir como caso de estudio para otras naciones que experimentan cambios demográficos similares. Recuerden, como dice Warren Buffet, la mejor inversión es en uno mismo, y no solo en salud, sino en un sentido más amplio.