Empresas “stay-at-home”
PUNEET VASWANI, ASESORAMIENTO Y GESTIÓN PATRIMONIAL
10/05/2020
“Quédate en casa”. Es posiblemente la frase más escuchada durante estos últimos dos meses. Bajo este precepto y con la aplicación del confinamiento en la mayoría de los países, el hogar pasa a ser el principal espacio de ocio y trabajo. Sin embargo, más allá de ocupar nuestro tiempo libre, hemos de reconocer que la tecnología jugaba un papel fundamental antes del Covid-19, y ahora tiene aún mayor peso.
Seguro que han caído en la cuenta de que las empresas que se benefician de la cuarentena en nuestros domicilios son, principalmente, aquellas relacionadas con la tecnología, que nos envuelve a todas horas de una manera o de otra: los niños y adolescentes con clases online, consolas y videojuegos; los adultos, por su parte, con la utilización de plataformas de streaming para entretenerse o para teletrabajar con distintas herramientas de productividad empresarial.
Esto se ve reflejado, por ejemplo, en los datos que aportó Telefónica durante el mes de abril, donde cabe destacar que durante el primer mes de confinamiento el crecimiento de tráfico acumulado en Internet fue de un 35% superior al 30% registrado en todo el 2019. Otro dato a destacar es que herramientas de videollamadas como Skype y Webex, han cuadruplicado su uso, sobre todo, por empresas y trabajadores.
¿A qué se debe este aumento de tráfico? La búsqueda de ocio para unos y la necesidad de mantener la actividad laborar para otros, son dos factores clave. En este segundo grupo, algunos han decidido comenzar a emprender, e incluso reinventarse, y aquellos que ya ostentaban negocios físicos han tenido como máxima en estos días digitalizarse y pasarse al comercio online. Para ello, han hecho uso de plataformas de venta como Shopify, cuya cotización registra una revalorización de prácticamente un 80% desde inicios de año. Otra empresa que ha registrado un crecimiento desmesurado ha sido Zoom Video. Esta plataforma permite hacer videoconferencias de una manera sencilla e intuitiva, permitiendo sesiones de hasta 100 participantes, por lo que ayuda a mantener el contacto con familia y amigos, o establecer reuniones de trabajo con una elevada calidad. A pesar de sus brechas en materia de seguridad, habiendo sido hackeados varios de sus usuarios, su cotización ha doblado su valor, disparándose desde los $68 a inicios de año hasta pasar los $150 esta semana.
Cabe destacar también, cómo no, las FAANG. Todas ellas son tecnológicas y están muy presentes en nuestro día a día. En primer lugar, Netflix: la principal plataforma de streaming de series y películas se ha visto enormemente beneficiada por el hecho de quedarnos en casa. El número de suscripciones durante el primer trimestre de 2020 pasó de una estimación de 8,2 millones a que se suscribieran casi 16 millones de usuarios. Por otra parte, el uso de las redes sociales también se ha intensificado, como es el caso de Facebook, registrando más 1.730 millones de usuarios diariamente. La semana pasada, anunciaba unos ingresos entre enero y marzo de $4.902 millones, mientras que en el mismo período de 2019 registró $2.429 millones. Amazon y Google, a través de la diversificación de servicios, han podido mantener resultados durante el trimestre. La primera, ha superado las estimaciones de $73,61 billones en ingresos, logrando los $75,45 billones; la segunda, se mantiene estable en cuanto a resultados se refiere. Por último, Apple pudo salvar el trimestre con la vuelta a la actividad en China a finales de marzo, además de con sus servicios de Apple Music y diversas apps, sin olvidar que la venta de portátiles también se ha disparado para poder teletrabajar.
La crisis económica derivada de la sanitaria provocada por el coronavirus, parece que no hace mella en estas empresas, es más, ha reforzado su posición dominante a escala global, llevando sus cotizaciones a nuevos máximos como es el caso de Netflix y Amazon, que ya superan los 440$ y los 2.350$ respectivamente, evitando así la debacle de las bolsas iniciada a mediados de febrero y que llevó a la mayoría de los índices a perder más de un 40% de su capitalización desde máximos.
Como en todas las crisis, hay “ganadores y perdedores” y consideramos que el Covid-19 va a tener un impacto en nuestros hábitos de comportamiento y consumo a futuro, cambiando nuestra escala de prioridades y concepto de bienestar. El virus no está controlado aún, y nos falta la vacuna. En este sentido, las compañías “stay-at-home” podrían tener aún mayor recorrido al alza, pero eso sí, conviene ser selectivos, cautos y como siempre, asesorarse bien.