El año de los unicornios
AARÓN RODRÍGUEZ, ASESORAMIENTO PATRIMONIAL
19/05/2019
En Bolsa se llaman unicornios a aquellos modelos de negocio innovadores y emergentes que logran alcanzar una gran cuota de mercado en muy poco tiempo dada su escalabilidad, y cuya valoración supere los 1.000 millones de dólares. Este año se esperan más de 100 salidas a cotización de este tipo de empresas, lideradas por Uber, Airbnb, SpaceX o WeWork, entre otras.
Una OPV es el proceso por el cual una compañía privada vende acciones al público y comienza a cotizar en la bolsa de valores. Es el evento que materializa el largo proceso de abrir al público la empresa. Antes de decidir si acudir o no a una salida a bolsa, es vital comprender los patrones de rentabilidad de las compañías en su salida, además de valorarla por su situación financiera, expectativas de crecimiento y situación del mercado actual. Como no cuentan con histórico de cotización, el mercado tarda más en poner en precio este tipo de empresas y es por lo que surgen buenas oportunidades. Pero que una gran empresa salga a cotizar no augura que vaya a tener un gran éxito, y si no que se lo digan a Morgan Stanley, el “lead manager” de la mayor salida a bolsa del año, que vio cómo su cliente evaporaba el 18% de la capitalización en tan sólo dos días.
Uber Technologies salió a cotizar la semana pasada en lo era la mayor OPV (Oferta Pública de Venta) de los últimos años tras colocar 8.000 millones de dólares, lo que implicaba una valoración superior a los 75.000 millones. Esta mega OPV podría haber sido incluso mayor de no haber sido por los inversores institucionales. Inicialmente, se había valorado a la compañía en torno a los 120.000 millones, valoración realizada por los bancos que presentaron a la empresa en octubre del año pasado. El precio de salida se mantuvo hasta unas semanas antes, cuando la compañía anunció que había rebajado las expectativas y que la salida se haría en el nivel de los 100.000 millones. Este ajuste, se debía a que muchos de los inversores institucionales que acudirían, ya habían adquirido una gran cantidad de títulos en las diferentes rondas de financiación privada, por lo que no encontraban motivos suficientes por los cuales tener que pagar cerca del doble de lo que inicialmente habían invertido.
Desde 2009, Uber ha levantado en diferentes rondas de financiación más de 10.000 millones, provenientes de los diferentes fondos de inversión y empresas de capital privado. En 2016, las gestoras T. Rowe, Vanguard y Tiger Global lograron levantar 5.600 millones lo que le otorgaba un precio de 61.000 millones. El asunto es, que este es el mismo tipo de inversor que normalmente acude a una OPV por lo que, cuando Uber comenzó a tantear el mercado para darle salida a sus títulos, se encontró con la dura realidad de que se los intentaba vender a los mismos accionistas que ya estaban dentro. Si bien es cierto, es muy probable que el único problema no fuera solo el precio, ya que la desaceleración en el crecimiento de ingresos, así como la mala evolución en bolsa de un pequeño competidor que saltó al parqué hacía apenas dos meses antes, también ha puesto en guardia a los inversores.
Como la mayor OPV del año, la oferta pública de Uber tuvo gran visibilidad en el mercado, pero no es la única startup de alto crecimiento que cuenta con el interés de los grandes inversores. Slack, que saldrá a cotizar en las próximas semanas levantó 400 millones en 2018, UiPath, una compañía de inteligencia artificial, completó otra ronda de financiación de 568 millones en abril, y esta semana Deliveroo, la empresa de reparto a domicilio, anunció que la propia Amazon va a liderar la próxima ronda de financiación, donde esperan obtener 575 millones. Aún hay muchos proyectos interesantes y desconocidos para el gran público, pero en un futuro quien sabe, si una de estas ideas nacidas en un “garaje” se convierten en los Google y Amazon de turno.