Bancos centrales de nuevo protagonistas
BORJA DE LA CRUZ, ASESORAMIENTO Y GESTIÓN PATRIMONIAL
31/07/2022
En las últimas semanas hemos asistido a las reuniones más importantes, desde hace años, de los bancos centrales con más peso: la Reserva Federal estadounidense y el Banco Central Europeo. Estas reuniones han sido particularmente importantes porque los banqueros centrales deben estar al tanto de la elevada inflación registrada en sus economías, además de lidiar con los nervios de la comunidad inversora, ya que se teme a una posible recesión económica.
Ambas instituciones optaron por seguir encareciendo el crédito mediante subida de tipos de interés. El BCE subió 50 p.b. mientras que la FED subió 75 p.b., mostrando así que están decididos a aplacar la inflación en EE. UU. y Europa actuando a través de un rebalanceo por parte de la demanda. Esta política más hawkish de los bancos centrales, a priori, es negativo para los activos con mayor exposición al riesgo. Sin embargo, el día en el que la FED comunicó su decisión sobre los tipos de interés, los mercados financieros hicieron un rally considerable motivados por este tipo de activos.
Entonces, si en un primer lugar esta política monetaria perjudica a los activos de mayor riesgo, ¿por qué las bolsas han hecho un rally apoyadas por estos mismos activos? Bien, la respuesta está en la rueda de prensa del propio presidente de la FED: Jerome Powell. Este comunicó que la FED ya estaba en terreno neutral en lo que a tipos de interés se refiere y que, a partir de ahora, la política monetaria será mucho más dependiente de los datos económicos que se vayan mostrando por el camino.
Para explicar la importancia de esta frase hay que entender que los tipos de interés neutrales son los tipos de interés, valga la redundancia, en los que el banco central considera que la economía desarrolla su PIB potencial sin contribuir a sobrecalentar o enfriar la misma. Es decir, cuando el banco central sube tipos por encima de territorio neutral está siendo restrictiva (hawkish) y cuando baja tipos por debajo está siendo acomodaticia (dovish). Y la historia demuestra que cada vez que la FED ha subido tipos por encima del territorio neutral acaba descadenando algo en los mercados financieros, por ejemplo: burbuja del punto com, Gran Crisis Financiera de 2008, etc.
Además, Powell en esa frase nos está indicando que no hay unas previsiones sobre a dónde se dirige la política monetaria, ya que será dependiente de los datos económicos. Por lo tanto, está dando pie a que el mercado ponga en precio las probabilidades que los inversores crean convenientes sobre cómo evolucionará la inflación y los tipos de interés. El mercado descuenta que se dará una reducción agresiva de la inflación, medida a través de los Swaps de inflación a 1 año, estimando que se situará para entonces en el entorno del 3%. Entonces, al estimar una reducción de ese calibre, el mercado espera que la política monetaria se empiece a dirigir hacia un entorno más dovish o, por lo menos, no se siga avanzando hacia un terreno más restrictivo. Dando lugar así, a que se incentive el apetito por los activos de mayor riesgo, provocando el rally bursátil vivido el pasado martes.
Sin entrar en si el mercado lleva o no la razón, o en conjeturas sobre si el rally bursátil continuará dejando atrás este mercado bajista que vivimos desde principios de año, seguimos considerando que la mejor opción es estar invertidos en compañías de calidad. Empresas que sepan navegar en aguas turbulentas como las que hemos pasado en los últimos meses, y sepan surfear los tiempos en los que todo va bien. Nos mantenemos ajenos a todo el ruido exterior, ya que confiamos en que el largo plazo acabe recompensando esas ventajas competitivas y esa calidad del negocio.